Inglés
Es una pena que sea el inglés el idioma que haya triunfado en lo comercial y empresarial. Pienso que de haber sido otro como el italiano o incluso el alemán lo hubiese tratado de aprender con más ganas y probablemente lo disfrutaría más en el ámbito personal. Dejo el inglés para lo estrictamente profesional. De hecho creo que hoy en día es una limitación muy grave no dominarlo para tu desarrollo en una empresa. Sin embargo en lo personal cada vez lo uso menos excepto en algunos momentos sociales no castellano- hablantes. Antes lo usaba frecuentemente cuando hablábamos entre nosotros. De hecho la recepción de broncas ha sido y lo sigue siendo en el idioma de Thomas More.
RM se pone nerviosa cuando cometo ciertos fallos gramaticales o no entiende como leo autores británicos o americanos en castellano. Y la verdad sea dicha es que no me gusta el inglés. Me parece un idioma de muy pocos matices, seco y antipático. Muy directo pero poco sutil. Práctico en lo gramátical aunque confuso en la silabización. El castellano aunque habitualmente lo mancho con muchos términos anglosajones me gusta por diferentes motivos pero el principal porque en él puedo expresarme absolutamente como yo me quiero expresar. ¿Será entonces un asunto de pereza intelectual?
RM se pone nerviosa cuando cometo ciertos fallos gramaticales o no entiende como leo autores británicos o americanos en castellano. Y la verdad sea dicha es que no me gusta el inglés. Me parece un idioma de muy pocos matices, seco y antipático. Muy directo pero poco sutil. Práctico en lo gramátical aunque confuso en la silabización. El castellano aunque habitualmente lo mancho con muchos términos anglosajones me gusta por diferentes motivos pero el principal porque en él puedo expresarme absolutamente como yo me quiero expresar. ¿Será entonces un asunto de pereza intelectual?