Talento y creatividad
Acabo de leer un ensayo sobre Mozart escrito por el profesor nacido en Alemania Peter Gay. Nunca me deja de asombrar el talento y la capacidad creativa que tenían los hombres de nuestros siglos pasados. En este sentido creo que el hombre actual como individuo creativo ha ido claramente a menos en contraposición con las individualidades del pasado. Que alguien como Mozart, Shakespeare o Velázquez tuvieran esa capacidad creativa tan arrolladora con las condiciones de vida en las que se movían nos deja sin duda en evidencia. La ausencia de tecnología, léase la escritura de partituras con pluma y con la única visibilidad de una vela hace aun más dramática esa realidad. ¿Cómo entonces hemos conseguido poder avanzar de manera tan extraordinaria en los últimos 100 años si nuestra capacidad como individuos ha ido a menos?. Creo que la clave reside en nuestra capacidad para organizarnos y poder colaborar de manera colectiva. En este sentido aunque el talento individual se ha deteriorado claramente el talento colectivo ha superado con creces a las individualidades. Otra clave puede residir en el espacio que exista para desarrollar. Cuando un arte se expande es lógico que la creatividad aflore a borbotones hasta que todo este casi inventado, así el espacio para crear disminuye y la capacidad creativa se desinfla notablemente. Por poner un ejemplo, el arte culinario, actualmente en plena expansión, donde tenemos grandes individualidades en que han sido capaces crear miles de platos innovadores con sabores y estéticas no vistas hasta la fecha.