Cine
Tengo la sensación de que el cine esta entrando en una fase de desaceleración y estancamiento. Por un lado los norteamericanos tienen obviamente grandes capacidades para hacer cine, tienen medios, industria y un objetivo muy claro y es que una película llegue al mayor numero de personas, o sea que comercialmente guste, por encima de todo a su público, el americano. Pero les faltan guiones y se nota cada vez más. Los europeos podríamos estar sobrados de guiones por propia historia, pero apenas hacen cine cuatro extremistas para ellos y sus amigos, despreciando claramente al resto de los mortales. Después, como no se vende, a pedir subvenciones que si no, no se come. La mayoría de las películas españolas o francesas son a mi juicio un enorme petardo del que siempre me queda una sensación de mal sabor porque se tiende hacia lo vulgar, “niña, esta noche no seremos putas, seremos princesas...”. En vez de regularizar el gusto para que nos guste a mas personas rebajan las maneras, las formas, la estética...
Los americanos se agarran a cualquier personaje propio, dentro de su escasa historia, para honrrarle con una película (Ray Charles, Johnny Cash, El aviador ...). En Europa tenemos cantidad de personajes de primerísima categoría que están completamente olvidados desde el punto de vista cinematográfico porque preferimos centrarnos en guiones absurdos y poco ilustrativos. Oigo a menudo que los americanos tienen mucho mas medios que nosotros para publicidad y distribución, pero cuando una película gusta, lo que mejor funciona es el boca a boca como fue el caso de Al otro lado de la cama o Tesis. Son películas divertidas e interesantes, que se vendieron dentro y fuera de España y en las dos los presupuestos fueron diminutos y nunca se publicitaron.
Por cierto, nunca había visto tanto cine internacional como el que estoy viendo en Nueva York. Desde que llegamos me he aficionado a ver con cierta regularidad películas argentinas, brasileñas, indias y hasta en un par de ocasiones películas surcoreanas y chinas.
Los americanos se agarran a cualquier personaje propio, dentro de su escasa historia, para honrrarle con una película (Ray Charles, Johnny Cash, El aviador ...). En Europa tenemos cantidad de personajes de primerísima categoría que están completamente olvidados desde el punto de vista cinematográfico porque preferimos centrarnos en guiones absurdos y poco ilustrativos. Oigo a menudo que los americanos tienen mucho mas medios que nosotros para publicidad y distribución, pero cuando una película gusta, lo que mejor funciona es el boca a boca como fue el caso de Al otro lado de la cama o Tesis. Son películas divertidas e interesantes, que se vendieron dentro y fuera de España y en las dos los presupuestos fueron diminutos y nunca se publicitaron.
Por cierto, nunca había visto tanto cine internacional como el que estoy viendo en Nueva York. Desde que llegamos me he aficionado a ver con cierta regularidad películas argentinas, brasileñas, indias y hasta en un par de ocasiones películas surcoreanas y chinas.